Hoy os traigo una receta que cuando vayáis a poneros a comer estaréis deseando que al de al lado le sobre para comer más canelones. Es una receta de mi padre y en comparación con todas las demás recetas de la web, las cantindades no están tan exactas porque está más hecha a ojo y con la improvisación de los años. Las fotos que veréis de esta receta salen nuestros canelones acompañados de patatas parisinas y ensalada de pimientos porque fue un plato que se sirvió como cena de Nochevieja, peeeeeero a os digo, que esto dan ganas de comérselo hasta para merendar. Y es más fáci de lo que parece. ¡Vamos a cocinar!
INGREDIENTES
- 16 láminas para canelones. (Si las encontráis precocidas mejor)
- 350 gr. aprox. de carne picada mixta (cerdo y ternera)
- 1 bote de leche evaporada (340 ml. aprox)
- 150gr. aprox. de paté ibérico
- 2-3 vasos de caldo de carne
- Vino blanco
- Piñones
- 2-3 dientes de ajo
- 1 cebolla
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
Para la bechamel
RACIONES
Para 4 personas, pero al ser una receta preparada con los ingredientes un poco «a ojo» puede salir para una o dos personas más
PREPARACIÓN
Pelamos los ajos y los picamos y sofreímos junto con la cebolla también picada en una sartén que tenga profundidad junto con un buen chorreón de aceite de oliva. Tened cuidado siempre de que no se os quemen. Añadimos la carne picada y seguimos sofriendo. Cuando veamos que se va haciendo agregamos un vasito de vino blanco y reducimos el fuego. Con todo bien mezcladito pasamos a añadir el paté y mezclamos. Agregamos los 2-3 vasos de calde de carne y añadimos sal al gusto. Dejamos hervir.
Una vez hecho todo esto, apagamos el fuego y agarramos la Turmix/batidora o como lo llaméis en cada rincón ( dejen sus comentarios y asi todos nos culturizamos de como se dice en cada parte del mundo) y batimos hasta hacer todos nuestros ingredientes una pasta homogénea. Echamos la mitad del bote de la leche evaropada ( unos 150 ml. aprox.) y removemos. La leche evaporada suavizará nuestra pasta de canelones y le dará más cremosidad. Tenemos que tener en cuenta que nos tiene que quedar una masa espesa, sino añadimos un poco de maizena (harina de maíz). Dejamos enfriar.
Si encontrásteis láminas para canelones precocidas mucho mejor porque la cocción será más rápida. Para que no se nos peguen mi consejo es que, una vez cocidas, las extendamos en la encimera de la cocina de una en una.
Y vamos a por el último paso! Si tenéis una manga pastelera mucho mejor y ahora veréis porqué. Como vamos a pasar a rellenar nuestros canelones si usamos la manga será mucho más fácil porque formaremos un churro en cada lámina y será más fácil de enrollar y luego colocarlos en una fuente para horno previamente engrasada con mantequilla. Colocad solamente una fila. Si os sobran canelones y tenéis otra fuente de horno tocaréis a más, sino ya tenéis la comida hecha para el día siguiente. Vertemos la bechamel sobre los canelones (encontraréis la receta más abajo), echamos un puñado de piñones por encima y metemos en el horno que previamente calentamos a 180ºC durante unos 15-20 minutos.
Cuando veamos que nuestra bechamel se empieza a tostar ya estarán listos. A servir y a comer que están muy ricos.
Para la bechamel
Derretimos la mantequilla en una cacerola grande (nada de esas pa’ cocer dos huevos) y, una vez derretida, vamos echando la harina poco a poco y removiendo hasta que se formen pelotas y la harina deje de estar blanca. Con la leche caliente hacemos lo mismo que con la harina y vamos añadiendo hasta llegar a hacer una crema. Añadimos sal y nuez moscada y apagamos el fuego. Si nos quedó demasiado clara y líquida añadimos maizena, pero intetad no echar leche como locos en el anterior paso.
CONSEJO. Si queréis darle a vuestros canelones aún un sabor más especial, agregadle unas gotas de Worcestershire o HP en el momento de mezclar la carne con la leche evaporada y no querréis comer otra cosa nunca más.
Y no olvidéis dejar vuestros comentarios y/o dudas.