Con la llegada del otoño llegan ricas verduras y llegan los quebraderos de cabeza de que cocinar con tanta verdura distinta. Hoy te traigo el pisto, sencillo, rico y sano que seguro habrás probado en casa de los abuelos o cuando te hacía tu madre. Además de sano, ofrece un sinfín de recetas con las que acompañarlo. Y dicho esto, manos a la obra.
- 1 berenjena
- 1 pimiento verde
- 1 calabacín grande
- 4-5 tomates hechos puré o tomate triturado en lata o tomate frito
- 1 ajo
- 1 cebolleta
- Sal y pimienta
- Azúcar (si no usasteis el tomate frito)
- Aceite de oliva
- 1/2 vasito de vino blanco
RACIONES
Depende de si lo coméis en plato único o para acompañar la pasta, carne, etc.
PREPARACIÓN
Picamos en dados pequeños la berenjena, el calabacín y el pimiento y reservamos. En una olla ponemos un buen chorreón de aceite a fuego lento. Picamos el ajo y la cebolleta y echamos en la olla una vez que el aceite esté caliente y tapamos. Cuando veamos que ya están algo pochaditos agregamos el pimiento y volvemos a tapar. El pimiento se agrega separado de la berenjena y el calabacín porque es más duro y tardará más tiempo en hacerse y la berenjena y el calabacín se nos quedarían pasados y «pochos». Una vez que veamos que el pimiento cambió a un color más suave, ahora sí, echamos la berenjena y el calabacín,el medio vasito de vino blanco, sal y pimienta, y volvemos a tapar.
Mientras que se van cocinando poco a poco estos ingredientes pasaremos a triturar los tomates. En este momento tenéis varias opciones. La que yo más uso es rallar los tomates como si fuera a usarlos para tostadas y además luego echo un poco de tomate frito. En el caso de que solo queráis los tomates rallados agregad un poco de azúcar para que quede más sabroso. La otra opción es comprar tomate triturado que ya venden en lata y agregar igualmente azúcar. O la última posibilidad es usar directamente tomate frito, sin pasaros, porque no queremos que se queden las verduras ahogadas.
Una vez que las verduras están listas, echamos la elección que más nos convenció de tomate a la olla y removemos. Comprobamos de sabor y rectificamos, si es necesario, la sal y la pimienta y ya esta listo.
La opción mas popular del pisto es comerlo con un huevo frito que colocaremos encima de nuestro pisto. Aunque también podéis combinarlo con pasta, como relleno de la lasaña o como guarnición de carnes y pescados.
¡Qué lo disfrutéis!
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